Esas plantas envueltas a los fierros del balcón.
Pasmadas y regaladas a las tardes tristes.
Ahogadas en mesetas berretas,
barridas sin silbido ni canción.
Todas ellas estarán ahí,
fecundadas de sentido.
Partícipes del beso y el violín.
Esa cara que no dice nada y a mí me dice todo.
Reservada, culmina mis tardes tristes.
Salada, besa mis vidriecitos,
temblequeando a fondo.
Quedará ahí.
A la espera del telón.
Enfundado hasta la nariz.
Esas plantas envueltas a los fierros del balcón,
quedarán ahí.
Esa cara que no dice nada y a mí me dice todo,
quedará ahí.
Para ser, algún día, victorianas y hermosas.
Para ser, algún día, triunfantes.
Para ser.
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9 comentarios:
Me gusta, me gusta
Julieta! Ha salido mi último libro, si estás en Madrid tal vez quieras acercarte a ver su nacimiento anaranjado. Un abrazo
;-)
para ser...que no es poco!
y asi andamos, buscando matices en las cosas o colores en el aire, para terminar pulverizandose en nuestra propia melancolía, que karma!
Un placer leerte
Las plantitas del balcón. En mi casa hay unas que apenas viven de lluvia ¿Qué vida las mantendrá con aguita triste o dulce según el sol o las nubes? Tengo la teoría de que viven de las alegrías o las penas de la gente que crece dentro o fuera del balcón. ¿Sera que mi compañera y yo, seremos como ellas?
Me gusta leerte Juli, un abrazo grande¡¡¡
Qué poco escucho a las plantas con la belleza que irradian...
Muak
Todo tiene su significado, aunque no lo parezca, aunque a veces nos sentamos hundidos en la insignificancia. Un abrazo.
es hermoso cuando el google reader me avisa de un nuevo post tuyo
me gusta leerte
me gusta lo que escribís
un saludo
Bueno, a la espera de nada más y nada menos que de Ser. Qué pavadita no! já
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